Contestar a la pregunta: cuántas emociones existen es bastante más difícil de lo que puede parecer. Esto se debe a que hay multitud de autores que han hablado sobre esta materia. Es decir, que en función del estudio al que prefieras acudir, te darás cuenta que algunos dicen que existen 4 emociones principales, otros opinan que 6, otros 7, incluso 8 o más.
Pero en lo que coincidirían la mayoría de todos estos expertos es en que conocer cuántas emociones existen y cuáles son, puede ser muy útil. Útil para ti, para mejorar tus relaciones, para conocer mejor tu entorno, para comunicarte, para conseguir tus metas, para resolver algunos conflictos, para relacionarte mejor contigo mismo, para tomar decisiones… Las emociones están presentes en todo lo que hacemos, así que reconocerlas puede ayudarnos en todas las facetas de nuestra vida.
En este artículo vamos a hablar de cuántas emociones existen, cómo podemos identificarlas y de cómo conocer y reconocer estas emociones puede ayudarnos personal y laboralmente.
¿Qué son las emociones y cuántas emociones existen?
Parece que vamos a adentrarnos en algo muy técnico o difícil, pero hazme caso, casi nada de lo que vamos a hablar aquí va a ser nuevo para ti. En realidad, llevas toda la vida analizando y aprendiendo a leer el entorno que te rodea y a las personas que están en él. Está en nuestro instinto. De hecho, no podríamos sobrevivir si no lo hiciéramos. O lo haríamos con muchas más dificultades.
Por eso, de manera natural, ya sabes identificar la mayoría de las expresiones y conductas que acompañan a cada emoción. Lo interesante es que nuestra idea con este artículo es ordenar esas emociones y exponerlas claramente. De forma que puedas usar esta información más conscientemente en tu propio beneficio.
Dicho todo esto. Vamos al principio. ¿Qué son las emociones? Como en su clasificación, hay tantas definiciones como autores que han estudiado el tema. Aunque, a grandes rasgos, podemos decir que las emociones son estados psicológicos propios de los seres humanos que cuentan con una respuesta expresiva o de conducta y con una respuesta fisiológica (en el propio cuerpo). Además, estas emociones y la forma que tenemos de manifestarlas, sentirlas y gestionarlas es única para cada individuo y depende muy estrechamente de nuestra experiencia vital. Esto explicaría que, ante exactamente la misma situación, haya personas que respondan gritando y otras llorando.
Así, podemos decir que existe un catálogo de emociones prefijado pero que cada persona las expresa y gestiona de una manera. También se puede afirmar que las situaciones que despertaran una u otra emoción también dependen de cada persona. En otras palabras, todos podemos sentir alegría, aunque no sentiremos alegría por los mismos estímulos ni la manifestaremos de la misma manera.
¿Cuántas emociones existen?
Hablemos ahora de ese catálogo cerrado de emociones que todos conocemos. Como decíamos al principio, no hay acuerdo sobre cuántas emociones existen.
Paul Ekman, autor de una de las clasificaciones más aceptadas, te diría que existen 6 emociones básicas. Pultchik asumiría que son 8 emociones básicas. Goleman distingue entre emociones primarias y secundarias, pero apunta que las segundas derivan de las primeras, que son en total 6. Greenberg también apuesta por 6 emociones básicas. La Universidad de Glasgow concluyó que existen 4 emociones básicas. Incluso Pixar, en su película “Del Revés” narra una historia con cinco personajes que vienen a representar a 5 emociones básicas…
En fin, como ves, todo depende de a qué estudio quieras acudir. No obstante, todos coinciden en considerar esas 6, o 7, o 4, o 5 emociones como básicas o primarias. En otras palabras, son de las cuales parten todas las demás emociones que podemos sentir. Estas emociones básicas se combinan y dan lugar a sentimientos más complejos, las denominadas emociones secundarias, complejas o derivadas. Así mismo, estas emociones más complejas se originan durante las experiencias de vida y por las relaciones sociales de cada uno de nosotros. No nos acompañan desde nuestro nacimiento como las primarias.
En cualquier caso, a partir de aquí, para nosotros, las emociones básicas van a ser 7: ira, alegría, asco, tristeza, sorpresa, desprecio y miedo.
¿Cuántas emociones existen y cómo puedo reconocerlas?
La ira es una de las emociones más fácilmente reconocibles. Cuando estamos extremadamente enfadados la frente se arruga como respuesta al movimiento de nuestras cejas: que bajan intentando juntarse. La mandíbula se tensa, la mirada se hace más profunda llegando, en algunos casos, a entrecerrarse los ojos. Incluso, algunas personas dilatan las fosas nasales y entrecierran los párpados.
La alegría es una emoción placentera ante una persona, situación o cosa. La alegría y la sonrisa van de la mano. Es más, la sonrisa es el principal indicio de alegría. Una sonrisa auténtica, además de implicar el típico gesto con la boca que todos conocemos, debe ir acompañada de la aparición de unas pequeñas arruguitas en el contorno de los ojos por la elevación de las mejillas.
El asco se provoca por un profundo desagrado ante un estímulo. Se distingue porque genera un levantamiento del labio superior y arrugas en la nariz.
La tristeza se manifiesta sobre todo en la boca. Los labios se curvan hacia abajo. Además, las cejas se curvan hacia arriba y hacia el interior. Es un sentimiento que asociamos con la pérdida.
La sorpresa es la respuesta a un estímulo inesperado. Se expresa abriendo mucho los ojos y la boca. Las cejas se arquean hacia arriba.
El desprecio suele vincularse con la ira y el asco. Es la única emoción que genera una respuesta facial solo en un lado de la cara, provocando que solo una de las comisuras de los labios se retraiga hacia un lado. En algunas personas se acompaña con una mirada de reojo.
Finalmente, debemos mirar a los ojos si queremos reconocer el miedo. Los ojos se abrirán mucho, como cuando nos sorprendemos, pero en este caso las cejas no suben. En muchos casos los labios se tensan y retroceden.
¿En qué me puede beneficiar saber reconocer las emociones básicas?
Entonces, recapitulando, tenemos una emoción puramente positiva: la alegría, una neutra: la sorpresa y cinco emociones básicas con implicaciones negativas: ira, asco, tristeza, desprecio y miedo. Todas acompañadas por particulares expresiones faciales reconocibles para aquellos que quieran verlas y que hemos desglosado justo en el apartado anterior.
Pero quedaría hablar de la utilidad de conocer todos estos datos. Pues bien, tienes que saber que las expresiones que acompañan a estas emociones son instintivas y espontaneas y no podemos controlar que aparezcan reflejadas en nuestra cara. Esto convierte a las emociones en la fuente de información más fiable en cuanto a comunicación no verbal y emociones se refiere.
Independientemente de su raza, edad, sexo o ideología, tu pareja, tu madre, tu jefe, tu compañero de clase…, todos, mostraran su respuesta con su comportamiento no verbal a las comunicaciones que tú les hagas. La cuestión es que aprender a conocer y expresar correctamente las emociones básicas (y, por tanto, las secundarias) es imprescindible si quieres establecer una comunicación eficaz y asertiva con tu entorno. Esto, no solo te ayudará a comunicarte mejor, sino también a conocer mejor a los demás. Y recuerda, la información es poder. Saber qué puedes decir para tener mejor relación con ellos, tomar mejores decisiones, explicar más exactamente lo que necesitas, interpretar mejor los comportamientos de los demás…
Este conjunto de habilidades que sirven para expresar y manejar las emociones y sentimientos se conoce como inteligencia emocional. Y aprender a trabajar esta inteligencia te acerará a conseguir tus objetivos y metas.
¿Quieres profundizar más sobre las habilidades sociales para mejorar tu empleabilidad?