Realmente, casi todos los días nos llegan currículum e iniciativas de candidatos y candidatas que piensan en nosotros para poder avanzar profesionalmente en el ámbito sociocultural. Si es tu caso, gracias por interesarte en nuestro proyecto 😉 Generalmente, estas personas nos envían candidaturas de lo más interesantes, que reflejan mucha formación, esfuerzo y experiencia. Aunque no siempre tenemos vacantes para todas ellas.
Para todos ellos, y para cualquier otra persona que haya acabado en nuestro blog, hoy vamos a hablar y a dar algunos consejos para avanzar profesionalmente en el ámbito sociocultural. Ya sabéis, contar algunas cositas internas que nosotros solemos tener en cuenta a la hora de valorar a los nuevos aspirantes y que vosotros podéis anotar para mejorar. Se viene INFORMACIÓN CONFIDENCIAL
Lo primero es lo primero, para avanzar profesionalmente en el ámbito sociocultural es necesario tener la formación adecuada
Por supuesto, vamos a valorar la formación que tengan estas personas. No es que la formación sea el aspecto más determinante, pero es necesario reunir y poder acreditar ciertos conocimientos básicos para desempeñar todos los trabajos. Incluso en el ámbito que te parezca que puede necesitar menos formación, existe una regla general: a más experiencia y más conocimientos, mejor profesional.
Así que esto es algo que tenemos en cuenta a la hora de valorar los currículums que recibimos. Pero, además, en muchas ocasiones, nosotros trabajamos para terceros que nos contratan para dar forma y ejecutar ciertas formaciones, talleres y cursos. Aquí, más que nunca, y a modo de toma de contacto sobre el profesional, sus titulaciones son miradas con lupa.
Hablando claro, la formación te da la oportunidad de meter la cabeza dentro de ciertas empresas o proyectos, es la primera toma de contacto, aunque no te ayudará a diferenciarte ni a mantener ese nuevo puesto de trabajo. ¿Quieres saber lo que sí podrá ayudarte con esto?
Trabaja la marca personal y no solo para avanzar profesionalmente en el ámbito sociocultural, sino en cualquier contexto
¿Sabes que es una tendencia entre las empresas buscar a sus candidatos en redes sociales? ¿Sabes que, según una encuesta realizada por la Universidad de Erfurt, uno de cada dos jefes busca el nombre de los candidatos en google? Serían la mitad. No es poca cosa.
Es en este punto cuando la marca personal cobra mayor importancia. Cuando hablamos de marca personal pensamos en la manera de construir y mejorar la percepción que los demás tienen sobre nosotros a través de acciones y comunicaciones controladas. Concretamente, si nos centramos en el contexto digital, estaríamos poniendo el foco en las comunicaciones y acciones online.
Una vez más, hablando más claro, la marca personal consiste en reflexionar sobre nuestros comportamientos, acciones y comunicaciones y controlar la manera en que estas serán interpretadas por los demás.
Por ejemplo, imagina que tú quieres ser contratado como monitor en los campamentos de verano que organiza el ayuntamiento de tu ciudad. Supón también que la empresa que va a contratarte te buscara en Instagram. En esta red social te encuentra a ti, que subiste un vídeo fumando y bebiendo en la discoteca anoche. También encuentran a otra chica que salió con sus amigas. Es posible que esta, igual que hiciste tú, fumara y bebiera, pero subió un selfie con ellas de forma pública y el resto de vídeos a mejores amigos (donde la empresa no está, obviamente). ¿Quién transmite una mejor primera impresión?
No es que haya que dar una imagen falsa. De hecho, lo ideal es parecer natural pero profesional. Como consejo, tal y como hizo la chica del ejemplo, también es posible tener privadas las redes sociales de las que se haga uso personal y públicas las que puedan ayudarte en el ámbito laboral.
Como ves, la marca personal, sí que puede ayudarte a ser diferente al resto de candidatos. Entonces, recapitulando. Con la formación, hemos pasado un primer nivel de requisitos. El control de una marca personal apropiada puede hacer que la empresa se decante por nosotros. Esto nos dará más experiencia, lo que, a su vez, nos hará más interesantes para otros seleccionadores ¿Y ahora cómo mantengo ese trabajo? ¿Cómo hago que la empresa esté contenta conmigo?
El gran truco para avanzar profesionalmente en el ámbito sociocultural es… que no hay truco. Solo buena actitud y trabajo duro
Lo sé. Suena muy típico. Pero dame una oportunidad para justificarme. En un mundo laboral que rebosa de trabajadores formados y experimentados. Con toda la información que tenemos al alcance de un solo clic. En un contexto digital en que la mayoría de jóvenes (y no tan jóvenes) cuentan con muy avanzadas competencias digitales. Solo puede haber algo que marque la diferencia. Esto es, esa forma particular que yo tengo de hacer las cosas, de preocuparme, de implicarme. Eso que hace que mi trabajo sea bueno, único y apropiado.
Los conocimientos se aprenden, puedes incluso, siendo proactivo, aprenderlos por ti mismo. La experiencia se gana con el tiempo, la marca digital se construye convenientemente, pero la actitud… La actitud se trae de casa, puede mejorarse, puede trabajarse, pero se tiene buena actitud o no se tiene.
Una buena actitud ante el trabajo implica ser un trabajador sano, positivo, resolutivo e implicado. Proporciona al trabajo un valor añadido que no tiene precio. Las empresas lo saben y, en la mayoría de los casos, no querrán dejar escapar a un trabajador que pueda darles tanto.